A medio camino entre Lavapiés y Las letras; Dos barrios con mucho rollo de Madrid. Encontramos junto al Cine Doré y el Mercado de San Antón, La Esperanza Bar.
Un local con una decoración inspirada en los años 70´s – 80´s, que nos encanta, nada más entrar te sientes como en casa. El Bar-Restaurante cuenta con dos plantas, en la superior se encuentra una amplia zona de barra, perfecta para tomar unas cervezas y picar algo. Y también un espacio para mesas. La sorpresa llega en la parte inferior con un par de salones de restaurante, perfectos para comidas y cenas más distendidas, y también para eventos y celebraciones privadas.
La Esperanza Bar surge de la unión de tres grandes del panorama de la hostelería: Mario Álvarez (Matute), Javier Goya (TriCiclo) y Ferrán Blanco. La Esperanza nos evoca a los bares de toda la vida, un bar informal y auténtico, sin grandes pretensiones… Fiel a la esencia de bares de barrio de siempre. Pero que aún así ha conseguido consagrarse como uno de los bares de moda de Madrid.
La Carta de La Esperanza Bar
En relación a su esencia de Bar de toda la vida, la cocina de La Esperanza Bar, combina los grandes clásicos de la cocina castiza como las croquetas, la ensaladilla rusa o los boquerones en vinagre… Con las grandes cocinas Mediterráneas, por lo que también encontramos cocas mallorquinas o platos de inspiración italiana cómo, pastas y risotto…
Uno de sus puntos fuertes son las tablas de quesos, con 10 variedades de queso nacional e internacional. Y también tablas de embutidos nacionales e italianos.
La carta es perfecta tanto para comidas como para cenas, y como no podía ser de otro modo, para compartir.
En nuestro caso fuimos a cenar, una típica noche calurosa de Madrid, por lo que nos decantamos por comenzar con unas Ostras aliñadas con Ponzu de Yuzu y huevas, un entrante perfecto para refrescarse! Nos gustaron tanto que repetimos.
Ostras aliñadas. La Esperanza Bar
Continuamos con dos de los platos recomendados en La Esperanza Bar.
Carpaccio de Manitas con gambas, vinagreta de boletus y jamón con brotes, un plato de inspiración Mar y Montaña, modernizado, que además aúna la cocina italiana con la cocina castiza, y le da un toque que lo lleva a otro nivel. Es un plato perfecto para compartir o como un entrante.
Carpaccio de manitas de cerdo. La Esperanza Bar
Por ultimo nos decantamos por la Coca Mallorquina, con pimientos, cebolla y sardinas soasadas. Al más puro estilo mediterráneo, nos gustó mucho ya que la masa de la coca era liguera y no se hacía muy pesada y las sardinas eran grandes.
Coca Mallorquina. La Esperanza Bar
Tenemos apuntado para la próxima probar: las patatas bravas con alioli, con salsa caseras. Y la Bomba de la Brceloneta, iremos a comer para atacar los platos más potentes de la carta.
Cuenta con una selección de postres de inspiración tradicional como el Flan con fresas y nata, el Tiramisú, la tarta de queso…
El ambientazo que se respira en La Esperanza Bar, invita a que después de comer o cenar, puedas disfrutar de una copa, mientras charlas en la sobremesa.
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